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domingo, agosto 23, 2015

Nota Roja

Era un leguleyo y de miedo el tembló.
Preparó su terno esperando lo mejor.
Sin saber siquiera le esperaba lo peor.
¡Él tendrá que estudiar más!

Por su nombre fue un profe quien llamó.
Nuestro mártir de su puesto se paró.
Y a la mesa de la muerte se sentó.
¡Al examen se lanzó!

Nota roja ¡Que manera de morir!
Se quedo sin Año Nuevo libre pa' salir.
Más tranquilo en Enero irá a rendir.
¡Tendrá que estudiar más!

Se sentó pensándose el Código Civil.
Rogando que no pregunte esa definición.
Pero siempre un profe lee la mente muy vil.
¡Eso le pasó por gil!

Un montón de babas de respuesta intentó,
Y a su puesto a sentarse el profe lo mandó,
Y su pololita que hace rato aprobó, con el profe se marchó.

Nota Roja ¡Que manera de morir!
Se quedó sin Año Nuevo Libre pa' salir.
Más tranquilo en Enero irá a rendir, ¡Tendrá que estudiar más!

domingo, agosto 16, 2015

Ilusión a los Sentidos.

Te veo en mi cabeza, pero no te puedo tocar.

No hay labios que reciban el calor de un beso.
No hay manos que busquen mi rostro, mi pecho y mi espalda.
No hay una piel que se estremezca bajo mis dedos.
Ni espera a mis brazos un cuerpo trémulo que esconder.


Te veo en mi cabeza, pero no te puedo oler.


No está tu pelo enredando mi barba con tu aroma.
No está la fragancia de tu cuello llamando a mis labios.
Ni siento tu perfume quedarse entre mis manos.
Ni tu aire se convierte en oxígeno para mi alma.


Te veo en mi cabeza, pero no te puedo degustar.

¿Degustar qué? ( Te preguntarás extrañada.)
¡No está tu boca, tus labios, no me fundo en el sabor de tus besos!
No se derriten mis labios al rozar tu fino cuello.
No se me hace agua la boca al sentir tu sabor, mujer.


Te veo en mi cabeza, pero no te puedo oír.

Y aunque el recuerdo de tu voz resuene en mi memoria,
no está la armonía de tus palabras, frías cuando quieres serlo.
No guardo registro de tu risa alegre cuando me la gano,
ni de ese tono especial con que me hablas tras un beso. 
(De esos que no te quieres imaginar.)


Te veo en mi cabeza ¡Pero en verdad no te puedo ver!


Es que no están tu sonrisa, ojos, rostro, gestos, mirada, sugerencia y beso.
No te observan mis ojos sin perder de ti un detalle solo.
No están allá mis ojos, recorriéndote con anhelo.
Aquí solos quedan los dos, cerrados, pensándote.


domingo, agosto 09, 2015

La seda.

Te recuerdo cuando estabas en febril primavera, posada a mi ventana, mujer quinceañera.

Me recuerdo allí a la espera en viril sentimiento, de una atrapada certera, de un púber pensamiento.




¿Qué somos ahora, qué somos? ¿Recuerdo, ilusión, pasión, sentimiento?

Hoy caminamos por otras calles y con otras gentes, nos topamos y nos vemos como extraños.

Pero sin buscarte mi mirada te encuentra, sin buscarme ya me ves, y al reconocernos pareciera que enrollamos un ovillo, recogiendo un fino hilo cual fibra de seda, que aparece a unir caminos, hallándonos sorprendidos, lanzándonos bien lejos, un rincón o a un destino, a mil sueños bien despiertos.